Une Journée d'Andrei Arsenevitchde Chris Marker [2000]
Francia
Una vez más, Chris Marker regresa con un documental sobre vida y obra de uno de los más grandes cineastas de todos los tiempos, al menos para mí lo es, Andrei Tarkovsky. Más que una película en la que se habla sobre su trabajo, se habla sobre la persona que fue y lo grandioso que era más allá de su cine, me refiero a su forma de ser como persona, con su familia, amigos, sus actores y su país que le dio la espalda mandándolo al exilio. Tarkovsky filmaba para todos ellos, sus películas eran dedicadas siempre para las personas que él amaba y esto significaba para él una especia de autobiografía, porque lo que lo formaba como persona era lo que más amaba. Para mí, Tarkovsky es uno de los cineastas con más influencia sobre mi ideología, más que por su cine, por su forma de pensar es que me sentí identificado siempre, con sus estudios sobre la luz y la imagen y la manera de sentirse con las personas que ama siempre me han parecido magníficas.
Hubo un aspecto en específico que me llamó muchísimo la atención en el documental de Chris Marker y que la verdad me conmovió muchísimo. En el final, pensando en la filmografía de Tarkovsky, él siempre incluyó una gran cantidad de leitmotivs, uno de ellos es el sonido del cucú y en La Infancia de Iván, siendo el primer largometraje de Andrei, al principio suena un cucú donde junto al sonido aparece un niño junto a un árbol jóven. En El Sacrificio, su último largometraje, aparece un niño acostado junto a un árbol jóven que está por morir. Durante la película al niño se le enseña cómo cuidar a este árbol que finalmente muere. Andrei no sabía que esta sería su última película pero como dice el documental, "es un gran cineasta que su magnífica filmografía se encuentra entre dos niños y dos árboles".
No hay comentarios:
Publicar un comentario